Investigación y redacción: Gicela Moreno-Julián Tapia
Al ser invadida España por el ejército de Napoléon en 1808,
la monarquía española representada por Carlos IV, se derrumba y por ello éste
decide ceder el trono a su hijo Fernando VII, lo que generó desestabilidad y
una serie de inquietudes en la Nueva España y que da paso a una vorágine
política que conduce en 1809 a la primera conspiración dada en Valladolid que
fracasó antes de llevarse a los hechos, es así como al año siguiente en 1810,
Miguel Hidalgo y Costilla y los demás conjurados vuelven a reunirse para
programar una sublevación armada que fue descubierta antes de la fecha que
tenían planeada, por lo que en el curso de la madrugada del 15 al 16 de
Septiembre tuvieron que convocar de manera urgente a iniciar el levantamiento y
es entonces que se da el famoso Grito de Dolores, en donde Hidalgo hace repicar
las campanas de la Iglesia del curato del pueblo de Dolores, Guanajuato y
arenga a la multitud a rebelarse contra el mal gobierno, contra la tiranía,
contra la esclavitud, contra monarquías y príncipes, contra las tributaciones y
contra los peninsulares con su famoso Grito: “Viva nuestra madre santísima de
Guadalupe, Viva la América, muera el mal gobierno, mueran los gachupines”
La Conspiración para dar inicio a esta rebelión contra la
condición de seguir siendo una colonia española, fue orquestada por este
valiente grupo de criollos inconformes con todas esas imposiciones y abusos
impuestos no sólo a los indios sino a ellos mismos, que los hizo rebelarse y
decidir encabezar un levantamiento independentista que definiera el destino del
entonces llamado Virreinato de la Nueva España hoy llamado México. Estos
criollos fueron: Don Miguel Hidalgo y Costilla cura del pueblo de Dolores;
Ignacio María de Allende, Juan Aldama y Mariano Abasolo militares separados del
ejército realista, Josefa Ortiz de Domínguez Corregidora de Querétaro y Leona
Vicario dama de la élite social criolla; también merecen mención en este
movimiento José María Morelos y Pavón, Mariano Matamoros, Ignacio López Rayón,
Nicolás Bravo, Guadalupe Victoria, Vicente Guerrero, “el Pípila”, Ignacio
Allende, entre muchos otros hombres y mujeres que ofrendaron su vida en pos de
una nación libre y soberana de la que ahora disfrutamos.
El Grito de Dolores dado por el Cura Miguel Hidalgo la
madrugada del 15 de septiembre de 1810 en el pueblo de Dolores Hidalgo
Guanajuato, definió el rumbo de la que ahora es nuestra patria pues esta lucha
concluyó con la firma de los llamados Tratados de Córdoba el 24 de agosto de
1821, de la que fue pieza fundamental el Gran Caudillo del Sur: Gral. Vicente
Guerrero al no dar cuartel en la fiera lucha.
No hay comentarios:
Publicar un comentario